El e-mail marketing es una estrategia digital clave para cualquier marca. Si tenemos una buena base de datos, nuestra agencia de comunicación de moda recomienda enviarles newsletters de forma habitual para hacerles llegar las últimas noticias de nuestro negocio así como lanzamientos, descuentos o ventas privadas.
El único requisito que más costoso de cumplir es que necesitas disponer de una lista de contactos de calidad y bien estructurada. Si la tienes ¡el resto son todo ventajas! El e-mail marketing es económico, totalmente personalizable, eficaz y, además, te ofrece unas buenas estadísticas sobre tus usuarios.
Eso sí, dado que la atención que prestamos los usuarios a la información que recibimos a través de páginas web, redes sociales o e-mails es muy limitada, apenas unos segundos, es importante optimizar al máximo estas campañas. Pero ¿cómo sacar el máximo rendimiento a tus newsletter?
Cómo diseñar una newsletter
Supongamos que ya dispones de una base de datos y de una plataforma, como Mailchimp o Sendinblue entre muchas otras, con la que hacer tus envíos. ¡Pasemos a la parte del diseño!
Selección de la plantilla: Todos los programas de edición de newsletter ponen a tu disposición una serie de plantillas predeterminadas. Antes de escoger una piensa qué es lo que quieres transmitir. Si en tu marca tiene más peso la imagen, si lo que quieres es mostrar una gran variedad de productos, si te decantas por contar una historia… En función de estas necesidades busca la que mejor se adapte a ti.
Estructura del mensaje: Similar a una nota de prensa pero mucho más breve, la estructura más lógica es un encabezado, un cuerpo del mensaje y un cierre o pie. Es imprescindible incluir el logo de la marca, un titular llamativo y las ideas más importantes con frases breves de fácil lectura. En el cierre siempre la información corporativa, los datos de contacto y los enlaces a redes sociales. Y, sobre todo, no te olvides de una o varias fotos potentes, ya sabes que una imagen vale más que mil palabras.
Llamada a la acción: Incluye siempre un botón que lleva a dónde tú quieras acompañar al usuario: tu página web, una landing page o una carpeta de prensa. El botón debe ser visible, con un mensaje que invite a clicar.
Asunto optimizado: Que el usuario abra o no tu correo dependerá en gran medida de que se sienta atraído por el asunto. Pero ¡cuidado! se penalizan aspectos como las mayúsculas o las exclamaciones. El asunto debe ser veraz y reflejar lo que realmente nos vamos a encontrar dentro del e-mail.